EL FASCISMO QUE PERVIVE

El fascismo sigue su curso en la Argentina, especialmente al amparo de quienes dicen combatirlo. Esta verdad de a puño no es interpretada así por la inmensa mayoría de los medios de difusión, ni por los periodistas, ni por los escritores, ni por los "intelectuales".
El fascismo es una formación autoritaria de juventudes organizadas en milicias unidas por el símbolo de las fasces romanas, esto es, la insignia del consul romano, para imponer un nacionalismo jerárquico opuesto al "internacionalismo" socialista. El autoritarismo basado en la supresión de los partidos políticos y los derechos individuales fueron la consecuencia inmediata en la Italia mussoliniana. Nacionalista, guerrero y antidemocrático, el fascismo fue copiado en todo el mundo con distintas variantes. El fascismo, en su esencia, como puede verse, no difiere en absoluto del comunismo. Excepto en un punto: el fascismo es anticomunista y se opone,como queda dicho, al "internacionalismo".
El fascismo es, pues, antagónico de la democracia y no difiere del sistema de partido único perteneciente al Estado de cualquier régimen comunista. La diferencia entre nacionalismos e interacionalismos es, casi, un simbolismo más. El internacionalismo soviético no buscaba otra cosa que el dominio imperial de los pueblos anexados, igual que el nazismo. Igual que el fascismo. Y hoy en día ese internacionalismo ha desaparecido, aún de la retórica marxista.
Esta breve reseña con la que intentamos definir el contexto de este comentario, es fundamental para avanzar el él.
¿Existe en la Argentina actual una clara existencia de partidos políticos o éstos tienden a desaparecer defenestrados por el poder del partido gobernante tal como ocurriera en México, por ejemplo, en los años que siguieron a la revolución zapatista original?
¿Existe en la Argentina de 1945 a esta parte algún vestigio de democracia sindical sin exigencias de "personería gremial" otorgada por el Estado y sin afiliación cuasiobligatoria?.
¿Se da en la Argentina partidocrática que nos toca vivir la posibilidad de "internas abiertas" (pese a la ley que sigue vigente) o de alcanzar un rango en una lista partidaria por mérito propio y no por amiguismo o nepotismo?
Este es un país esencialmente prepotente y autoritario. Los "lomos de burro" para frenar autos que deben ser frenados por carteles o por multas. Los cajones de manzanas que prohíben estacionar. Los piqueteros que cortas rutas y puentes encapuchados y empalados (o toman comasarías para convetirse en funcionarios del gobierno y luego cortar tranqueras de propiedades privadas). Los sindicalistas que muchas veces se "refugian" en el bunker del sindicato para no ser desplazados. Las cámaras empresarias que defienden cotos de caza evitando mediante "lobbies" la competencia externa. Los consejos de profesionales que obligan a afiliarse para ejercer cualquier profesión. La educación básica y la superior basada en "planes de estudio" de contenido oportunista y político elaborados por los funcionarios de turno. La prepotencia de funcionarios que pretenden que los precios no suban. El propio presidente insultando y mandando a los piquetes contra estaciones de servicio, o acusando a empresarios de "meter la mano en el bolsillo de la gente", o a empresas "privatizadas" de cortar la luz a propósito sin demostrarlo jamás.
Este es un país fascista, lo hemos dicho mil veces. Y es prepotente. Y las "bandas" y las "barras" son necesarias para conservar el coto de caza. Acá no hace falta ganar elecciones libres. Hace falta tener patoteros armados que impidan que cualquier ciudadano se acerque siquiera a lidiar por un cargo sindical o político.
¿Cuántos familiares de políticos están en cargos elegidos por el pueblo por haber sido incluidos en listas sábana?. ¿Cuántos son empleados, funcionarios, asesores, "contratados" o "subasesores" (como decía Tato Bores) ?. La lista es interminable. Es más que interminable, es inimaginable, porque son muchos los que evitan poner su apellido paterno para evitar ser "descubiertos" como alguna vez denunciara públicamente y por escrito Marta Oyhanarte cuando le cuestionaron que nombrara a su hija como "secretaria".
En un país de tal grado de primitivismo y voracidad, ¿cómo es posible que un presidente pretenda erguirse en dueño de la moral?
¿Quién "compró" a Borocotó?, ¿Quién a centenares de intendentes y cómo?, ¿quién se anota en cuanta campaña para eternizarse en el poder se lleve a cabo en las provincias, (como hoy en Misiones) en contra de la más elemental decencia política y democrática?. ¿Quiién no devolvió los fondos de Santa Cruz (que sepamos) y alguna vez elogió con bombos y platillos a Menem?.
Esto no pretende ser una acusación, sobre todo en materia de manejo del dinero. Es un dato que los fondos públicos los usa indiscriminadamente el jefe de gabinete si superan lo presupuestado. Y el año 2007 tiene previsto un crecimiento del 4% cuando todos los pronósticos serios anuncian un mínimo de un 6% (con un arrastre estadístico de un 3%). ¿Es verdad o no que muchos fondos se usan para hacer obra pública en provincias o municipios adictos?
Hay intendentes que han sido de todo, como Quindimil, para citar un ejemplo. Renovadores, menemistas, duhaldistas, kirchneristas y mañana tal vez "cristinistas". Da igual, ¿Esta es la nueva política?
Pero no queremos desviarnos del centro de atención. En un país donde las patotas y los barrabravas son sostenidos evidentemente por el poder político y aparecen en todas las manifestaciones con sus consabidos bombos e incluso armados (como "la Tuta" en el hospital Francés o Quiroz en San Vicente) ¿existe la democracia en su genuina expresión?
¿Por qué se suspendieron las internas abiertas y se presentaron tres candidatos justicialistas a la elección de la cual finalmente saliera presidente Kirchner?.¿Por qué Duhalde no terminó su mandato tal como lo exigía la flamante constitución del 94?, ¿Por qué en esa reforma se puso un tope del 45% para ganar en primera vuelta cuando es obvio de toda obviedad que para ganar hay que obtener la mitad mas uno?.¿Por qué los amigos y los opositores de Menem votaron eso?
Si Ud., señora, señor, siente que son injustos con Ud. en algo, ¿qué hace?. Recurre a la justicia ahora que la corte es "independiente" pero Kirchner no propone los nombres faltantes, ya que hace rato que quedan 7 y deben ser 9?. ¿Por qué Kirchner no dice nada de eso?
¿Por qué se reformó el consejo de la Magistratura pese a la oposición de la inmensa mayoría de los juristas otorgando un poder político a un tribunal?. ¿Por qué fue votado en el Congreso?. ¿Alguien confía seriamente en la justicia?
En las provincias ni hablar. Monseñor Piña en Misiones no dice que es una joda porque es un religioso, pero todos piensan que la justicia es joda.
¿Qué hacemos si nos roban?. ¿Vamos a la comisaría a hacer la denuncia?, ¿con qué objeto?. ¿Alguno de nuestros amables lectores ha visto que la policía concurriera al lugar del hecho y tomara, por ejemplo, huellas digitales como en cualquier película berreta de la TV?. ¿Sirve de algo denunciar algo?.
Esta es la base de la gran decadencia de la Argentina. Acá no hay un estado de derecho. "Al enemigo ni justicia" dijo alguna vez Perón. Los derechos humanos no deben defender a criminales o ladrones dice Patti. Es decir que si por casualidad cae en nuestras manos un ladrón, apaleémoslo, crucifiquémoslo. Asesinémoslo. Despanzurrémoslo. Sé igual. Ya que perdíó sus derechos. Eso lo dijo Perón, señores. El mismo líder cuyos restos eran llevados a San Vicente cuando los pistoleros se agarraron a tiros. Y aquel entrañable amigo y compañero Antonio Cafiero preguntó por televisión "¿hubo algún muerto?, entonces...para qué hablás si no sabés" a un "movilero" que intentaba consultar no sabemos qué ni nos importa.
No hubo muertos, Cafiero. Esta vez no hubo. Sigamos así.
Cafiero no es cualquiera. No es un inimputable. Ha sido desde siempre funcionario, diputado, senador, gobernador, precandidato presidencial, ministro de economía, etc del peronismo. ¿Esta es la "doctrina", Cafiero?. Si no muere nadie, podemos emprenderla a los tiros por televisión en medio de la multitud?. Después de haber firmado a fuego que al enemigo no le corresponde justicia y que "por cada uno de los nuestros que caiga caerán 5 de los de ellos" de un líder cuyo nombre figura en toda la geografía del país casi sin excepción, ¿qué podemos esperar? Entiéndasenos: no es que nos la agarramos con Perón, es que ése es el lider cuyo cadáver genera esta escena pantagruélica y surrealista de un personaje de historieta sacando su pistola y emprendiéndola a los tiros ante las cámaras, con total y absoluta impunidad e indiferencia. Y un "referente" abogado como Cafiero, cuyos hijos la van de "progresistas" dice las pelotudeces que ha dicho por televisión.

Y estas cosas, y tantas otras, a nadie sorprenden.
El diario procomunista Página 12 acaba de descubrir que los "barras" están apañados por políticos. Está en la edición de hoy. ¿Están jodiendo y confundieron la fecha con el 28 de diciembre? No. Quieren creer que acaban de dar con la primicia más relevante de la historia reciente. Señores lectores: los barras son protegidos de la política. Compren Página y entérense de la novedad. Luego de eso, el silencio, claro está. Héctor Blas Trillo (21/10/2006)