LA DESOCUPACIÓN
Según los datos oficiales la desocupación subió, en el primer trimestre de este año, de 7,7% a 7,9%, lo cual obviamente es un dato preocupante. Pero acá hace falta, una vez más, acercar un poquito la lupa para ver de qué se trata.
Durante muchos años, los gobiernos populistas pretendieron resolver el problema de la desocupación creando empleo público. Eso ocurrió a nivel nacional, provincial y municipal. En algunas provincias como Formosa, por ejemplo, la gran mayoría de los empleados lo son en el sector público. En mayor o menor medida, esto ocurre especialmente en las provincias pobres.
Desde el año 1960, el tamaño del Estado se multiplicó por tres, de tal forma que ni falta hace entrar en detalles. La falta de inversiones ha sido un clásico argentino, especialmente durante gobiernos peronistas, con excepción de los primeros años de Carlos Menem.
Para no marearnos con datos históricos, digamos que desde el año 2011 no ha habido inversión privada genuina como para generar empleos. Fue en ese año que se impuso el cepo cambiario por primera vez, como para acogotar más todavía la economía de por sí inviable o poco menos MIentras tanto la población ha crecido, y se multiplicaron los "planes" que en las estadísticas son tomados como "empleos", del mismo modo que son tomados como empleados quienes hubieran trabajado un día en la última semana, o algo así.
La llegada del actual gobierno y su decisión de ajustar el gasto público a la realidad económica ha generado desempleo, obviamente. Muchas personas "contratadas" por el Estado (una farsa para evitar el costo del empleo en relación de dependencia), fueron finalmente cesanteadas, lo cual equivale a no renovar sus contratos. Es triste y feo, pero es así y es la consecuencia del desbarajuste de tantos años.
No voy a tomar como referencia el mensaje del gobernador Kicillof, que para mí es un inimputable, pero vale la pena citarlo. Acaba de decir al referirse a este asunto que "se está cumpliendo el plan de la derecha", mientras mantiene el gasto público improductivo, lo acrecienta, y ajusta los impuestos provinciales, al tiempo que posibilita que los municipios eleven las tasas de servicios a valores estrafalarios.
No es más que un detalle adicional, pero si suben los impuestos y tasas, esto deteriora el costo de vida de los afectados, y por lo tanto influye en el índice de pobreza.
En la Argentina, durante décadas se atacó a empresarios, a comerciantes, a productores. Se prohibieron importaciones, se prohibieron exportaciones, se gravaron estas últimas con impresionantes alícuotas de retenciones, se prohibió girar utilidades, se prohibió comprar moneda extranjera, etc. etc
Se acusó e insultó a quienes subían sus precios, de los penalizó, se llegó a perseguir a consultoras que hacían sus propios cálculos no coincidentes con los datos del INDEC. Se violaron leyes, normas, disposiciones. Se confiscaron empresas como YPF, Aguas Argentinas y otras, se apropiaron de las AFJP, se fijaron tarifas que nos dejaron sin gas, sin electricidad, sin combustibles líquidos, sin petróleo....se vilipendió a la actividad agropecuaria, se mintieron los índices de inflación, de pobreza, de lo que sea.
Se apoyó a delincuentes con engendros tales como "Vatayón milintante" o “HInchadas unidas argentinas", se abrieron las cárceles, se hicieron afirmaciones por parte de personajes públicos que jamás fueron llevadas a la justicia, como por ejemplo "yo salgo de caño", "robar, pero con códigos", "los jóvenes no tienen laburo y salen a vender droga", y por supuesto el líder máximo del nazifascismo argento, que para muchos es un prócer, llegó a decir "al enemigo, ni justicia" según puede verse en YouTube.
Hoy mismo una persona acusada y condenada en todas las instancias por ladrona, cuenta con un 40% de imagen positiva según una encuesta reciente. En las cárceles sigue ganando el peronismo por lejos. Es así. También el asesino Barreda era admirado. Y Schoklender se asoció a Bonafini y recibió miles de millones, lo mismo que Milagro Sala, Pérsico, Beliboni, Grabois y tantos otros.
Sumando todos estos antecedentes, es obvio que no haya nuevos empleos, que caigan inclusive empleos privados, especialmente de aquellos rubros ultraprotegidos por el Estado y por lo tanto incompetentes en la mayoría de los casos. También habían caído muchísimos empleos en la pandemia, pero entonces a Kicillof y los suyos no les preocupaba. Tampoco parece preocuparle los miles y miles de dólares que perdió el país por la confiscación de las accionesd de Repsol, para "nacionalizar" YPF, siendo que el petróleo nunca dejó de ser "nacional", dado que el subsuelo lo es.
La Argentina no está asi por culpa de Milei, o, si les gusta más, Milei no es el único culpable ni muchísimo menos.
Se habla de los jubilados sin aportes, aunque muchos de ellos sí tienen aportes, solo que no completaron los 30 años requeridos. Lo cierto es que se sumó gasto público, como se sumó con asignaciones por hijo universales, planes de ayuda de por vida, jubilaciones por invalidez, subsidios infinitos al transporte público, creación de reparticiones públicas inútiles, impresionantes gastos en propaganda política y "pauta" en medios amigos, etc etc.
Un veradero barril sin fondo de gasto a cargo del Estado para quienes no producen ni producían nada.
El gobierno de Macri no se animó a hacer el ajuste. Se hablaba de que no era posible hacerlo de golpe, que había que ir de a poco. Así es que se volvió insostenible, por la sequía, porque se cortó el financiamiento externo. O porque las inversiones no llegaron. No es tarea sencilla volver confiable a la Argentina luego de décadas de incumplimientos. Incluyendo los vítores de los legisladores cuando en 2002 Rodrígues Sa aunció el no pago de la deuda.
Muy bien, en este punto estamos. Todos nos ajustamos el cinturón y parte de la oposición habla de "deuda con las provincias", como por ejemplo la Señora. Cabe recordar entonces que fueron ella y su marido quienes quitaron a las provincias el 15% de la coparticipación, por lo cual varias fueron a la Justicia y finalmente el fardo de devolver lo quitado durante años tuvo que resolverlo el gobierno macrista.
No me gusta poner intenciones en el otro, yo no sé si son buenas o malas las intenciones últimas de Milei, solo sé que ciertas cosas eran y son imprescindibles. Por eso cae la tasa de inflación y no son pocos los precios que caen, a través de promociones o como sea.
Hay otros factores que contribuyen a la desocupación, como por ejemplo el salario mínimo fijado por el Estado, pero no quiero extenderme más. Falta que asumamos, todos, que todas las ayudas y las dádivas durante todos estos años no han hecho otra cosa que aumentar la pobreza, bajar la producción y la productividad, aumentar la inflación que afecta antes que nada a los sectores más postergados, etc. Los resultados están a la vista