Translate

sábado, 15 de octubre de 2011

¿ACASO GANÓ DEL SEL? 27/7/11

El Ágora

¿ACASO GANÓ DEL SEL?



Por esas horas asistimos a lo que podríamos llamar una verdadera Cadena de la Reacción en contra del candidato a gobernador por la provincia de Santa Fe por el partido Unión PRO Federal: Miguel Torres del Sel.

Resulta cuando menos paradigmático el ataque a la persona de del Sel, especialmente de parte de conspicuos autocalificados de “intelectuales” que no han dudado ni dudan en utilizar todo tipo de adjetivos para descalificar la figura de este comediante devenido en político que de la noche a la mañana cosechó casi en soledad algo más del 35% de los votos en su provincia.

Sabemos desde hace ya varios años que la política seguida por el gobierno nacional ha sido la de atacar en persona a Mauricio Macri en la Capital Federal, acusándolo de cuanto a uno pudiera ocurrírsele, por acción o por omisión. También se le han abierto causas y en el caso de las escuchas ilegales ha sido procesado el actual jefe de gobierno, aunque cabe decir que hasta el momento la justicia no ha fallado condenándolo o absolviéndolo. En los últimos días se ha difundido la noticia de que el partido PRO utilizó una metodología reñida con la verdad al llevar adelante una encuesta con afirmaciones tramposas respecto del padre del candidato kirchnerista Daniel Filmus. Reales, dudosas o infundadas, las acusaciones a Macri se han multiplicado, como decimos, hasta el infinito. Los enfrentamientos por el manejo de la policía y la cuestión de la seguridad alcanzaron su paroxismo en oportunidad de la ocupación del Parque Indoamericano, para culminar con el envío de gendarmes y prefectos en cantidades inusitadas a la zona sur de la ciudad, pocas horas antes de la elección en la cual obtuvo una ventaja de 20 puntos sobre el contrincante Filmus.

La comparación que hacemos entre Del Sel y Macri no es ociosa. Como se sabe ambos representan el mismo “espacio” político.

Los ataques que ha recibido el santafesino en estos días asustan por su liviandad y por su descaro. Ofenden la inteligencia del más pintado de los pintados. Las diatribas no cesan aún, porque como cuadros neuróticos no terminan de satisfacer a quienes los padecen, que se ven así obligados a repetir, una y otra vez, comentarios absolutamente antidemocráticos, clasistas y facciosos. Ofensivos no sólo con el candidato, sino con sus votantes.

Pero Macri ha ganado y seguramente ganará el ´próximo domingo en la segunda vuelta capitalina. En cambio del Sel no ganó en Santa Fe. ¿A qué se debe semejante catarata de indignidades hacia su persona y hacia la de sus votantes?

Macri y del Sel representan un sector político que molesta especialmente al gobierno kirchnerista. A Macri se lo ha asociado con la dictadura, con los negocios del padre, con la vagancia y hasta con la xenofobia y el antisemitismo; y no vale la pena abundar con qué cosas más. Pero a del Sel no es posible acusarlo de nada de eso. Si bien no pretendemos salir en defensa de ninguno de los dos, lo cierto es que el santafesino no “da el pego” de ninguna acusación fascista que se precie.

Entonces, de qué se lo acusa. De simple, de vacío, de carecer de contenido ideológico. De hueco. De cómico. De irrelevante. Si nos descuidamos, pasa a ser un estúpido liso y llano. Una especie de Chauncey Gardiner, aquel personaje de Jerzy Kosinsky encarnado en el cine por el magistral Peter Selers.

Daremos un par de ejemplos de las cosas que se dicen del candidato del Sel:

El inefable Horacio González, el Director de la Biblioteca Nacional famoso por su lastimosa carta pública pidiéndole al gobierno que censurara a Mario Vargas Llosa en la última Feria del Libro de Buenos Aires, ha dicho entre otras lindezas que del Sel representa el “vaciamiento completo de la palabra política”. Palabra que sin duda llena hasta la médula el susodicho representante del fascismo cuasi ilustrado, por decirlo suave.

Por su parte, el derrotadísimo Agustín Rossi, jefe de bancada de diputados del kirchnerismo nacional, señaló que del Sel no es otra cosa que Macri. Expresa la derecha en la Argentina, que hoy se quiere disfrazar con un discurso de la antipolítica, que es verdaderamente horrible.



Ya no digamos el fascista director de la biblioteca, pero el diputado Rossi podría haber hecho una autocrítica de su derrota en lugar de emprenderla con palabras cargadas de fascismo en contra de “la derecha” que se “disfraza”. Ya estamos bastante hartos de los discursos pelotudos, realmente. Y perdón por el premeditado exabrupto. Es que uno se cansa de que pretendan tomarlo por salame.



No somos sociólogos, ni psicólogos, ni politólogos ni nada parecido; pero podemos aplicar o intentar aplicar al menos el sentido común para entender lo que pasó en Santa Fe.



El socialismo es gobierno hace ya unos años y representa el intervencionismo estatal desde un lugar diferente al que tradicionalmente ha utilizado el peronismo. Como principal cuestión, el gobernador Binner no parece dedicado a violar las normas, prepotear a la gente o mentir en los índices de inflación y de pobreza. No utiliza la cadena nacional para hacer discursos de propaganda, no incrementó su patrimonio varias veces, ni maneja la “caja” provincial para ayudar a sus amigos. En fin, aparece como una persona más o menos decente que lleva adelante su gobierno con sobriedad y perfil estándar.



Tiene en común con el kirchnerismo ese afán intervencionista que lo lleva a apoyar las retenciones al campo, la apropiación de los fondos de las AFJP o la estatización de Aerolíneas Argentinas. Que no son temas menores, por supuesto. Y que por lo tanto condicionan a una buena parte del electorado.



El socialismo santafesino se muestra, entonces, como bastante más respetuoso de la institucionalidad, aunque con notorias fallas como en el caso del robo a las AFJP que ha considerado legítimo. Aún así hay que decir que en este aspecto, tal vez ilusoriamente, Binner pretendía la intangibilidad de los fondos que se derivaron a la ANSES. Una pretensión cuando menos ingenua, partiendo nada menos que de un político con aspiraciones presidenciales.



El kirchnerismo, por su parte, de la mano de Agustín Rossi y de su hermano Alejandro, ha demostrado de sobra lo que es en esa provincia. Apretador, prepotente, manejador de los fondos públicos enfocándolos a los amigos, controlador de precios, aplicador de retenciones a mansalva. Insultador. Acusador sin demostrar jamás sus acusaciones.



Si bien tanto socialistas como kirchneristas pueden coincidir en que es necesaria la intervención del Estado porque parece que de lo contrario todo funciona mal en la vida económica del país, lo cierto es que el kirchnerismo ha demostrado en Santa Fe lo que es y ha sido.



Como se sabe, las prohibiciones a las exportaciones de diversos productos primarios, especialmente de trigo, han producido y siguen produciendo un daño enorme en la economía provincial. Y no sólo a quienes producían y aún producen trigo. Porque es obvio que una provincia agrícola, ganadera y agro industrial al sufrir esa clase de ataques, ve deteriorado su estándar de vida de manera evidente. No solamente sufren quienes no pueden vender lo suyo. También sufren quienes esperan cobrar los productos y servicios que le han vendido a esos productores. O que esperaban venderles. Sufren también los comercios (restaurantes, casas de ropa, jugueterías o lo que sea). Y sufren finalmente los empleados de las diversas actividades afectadas. Y no es que el gobierno kirchnerista no sepa todo esto, la prueba está en que acaba de liberar 450.000 toneladas de trigo para su venta. Nada mejor que una urna para llamar a la reflexión, ¿no es cierto?



Hay que recordar que las retenciones a las exportaciones no son más que una pequeña parte del problema vinculado con el comercio exterior que afecta a la provincia. Las prohibiciones van más lejos, porque NI AÚN ACEPTANDO PAGAR LOS IMPUESTOS QUE LE PIDAN los productores pueden vender si el gobierno nacional no los autoriza.



¿Y qué representan Rossi y su hermano (aquel que pidió investigar a qué colegios mandan sus hijos los jueces)? Representan esa forma de gobernar. Esta es la realidad que parece que no pueden o no quieren aceptar. “La derecha” estuvo siempre y siempre va a estar porque es una expresión ideológica más y tiene todo el derecho del mundo de serlo. ¿O no?



Pero el problema no es “la derecha”. El problema es el abuso de poder, la prepotencia y el intervencionismo a mansalva. Binner no tiene un Guillermo Moreno. Rossi, como apéndice de Cristina, sí.



Rossi en su descarga neurótica habla de un discurso de la antipolítica, que le parece horrible. En verdad se trata del discurso tipo “que se vayan todos”, ¿no?. Algo parecido a lo que está ocurriendo en España, ¿verdad? La gente está indignada con los políticos tradicionales y busca otra cosa.



¿Es necesario agarrárselas con la figura de del Sel? ¿Es del Sel algo diferente de lo que pudo haber sido Nito Artaza? No queremos hacer comparaciones personales, cada cual que ubique a los distintos actores donde quiera. Pero del Sel es un actor cómico igual que Artaza.



Y no proviene de la política como tampoco provienen de ella Scioli, Reutemann, Claudio Morgado (también cómico, hay que decirlo) o Fito Páez.



¿Se ataca a del Sel por ser “de la derecha”, entonces? ¿O se lo ataca porque es un Mr. Gardiner? Porque son cosas bien diferentes, ¿no?



No hagamos más lucubraciones. Se lo ataca porque les produjo un hermoso grano en salva sea la parte. Porque no se bancan el disenso. Porque se han creído que 6,7,8 representa la verdad de la vida y de la historia y es un programa pedorro regenteado por adictos al régimen y sostenido con fondos públicos en un canal de televisión del que la camarilla gobernante se ha apropiado.



Del Sel no ganó y casi podríamos decir que es mejor, como bien ha dicho Enrique Pinti. Porque si hubiera ganado le habrían hecho la vida imposible que le han hecho a Macri. E insistimos, para los básicos que nunca faltan que no somos macristas. Pero está clarísimo lo ocurrido en la Capital Federal en estos últimos años. Tan clarísimo está que cualquiera que recuerde a una ministra junto al periodista Horacio Verbitzky denunciando corrupciones en la policía federal para desdecirse al día siguiente, no necesita nada más.



Del Sel representa a la gente que no tiene otra opción que esa para intentar defender su dignidad. Representa también la apoliticidad, la no pertenencia a la lacra que se enriquece a mansalva y nunca terminada de ser procesada. Representa a la gente que quiere un poco de aire fresco entre tanta mierda. ¿Eso es horrible? Claro que no. Eso es refrescante, por eso trinan como trinan.



Nosotros no sabemos si algún día este actor podrá ocupar un cargo ejecutivo y hacerlo bien. Repetimos: no sabemos. ¿Cómo saben los reaccionarios encaramados en el poder central que no podrá? ¿Cómo saben que el tipo es un Mr. Gardiner?



La verdad es que lo único que les queda es salir a descalificar. Otra no tienen. “Al cómico inepto y energúmeno lo vota la derecha reaccionaria y patética” ¿Esa derecha representa nada menos que un 35% del electorado santafesino? ¿O resulta que hay gente que está podrida de la prepotencia, de los impuestos, de la inflación, de las trabas burocráticas para sacar una miserable carta de porte o lo que fuera, decidió decir basta?



Pueden quedarse tranquilos sin embargo, porque, reiteramos, el cómico no ganó. El intervencionismo en todas sus formas representa en Santa Fe el 62% de los votos. Tenemos distribucionismo para rato. Claro, no a cargo de Rossi y sus amigos. Y eso es insoportable para la Casa Rosada. Tan insoportable que junto con el desprecio al adversario aparecen los explicadores oficiales tratando de despegar a Cristina Fernández de la elección provincial, cuando fue ella quien en oportunidad del acto por el Día de la Bandera, tan caro especialmente a los rosarinos, utilizó el atril para hacer campaña en favor de Rossi, como acaba de hacerla hace pocas horas al inaugurar una planta de gasificación, donde acusó al gobernador Binner, de manera casi canallesca, de no hacer crecer a su provincia como crece el resto del país. Y como decimos, ahora, luego de la paliza electoral, acaba de liberar 450.000 toneladas de trigo, mientras los explicadores insisten en que no hay que confundir la provincia de Santa Fe con la Nación. A pedido de Cristina, por supuesto.



Pónganse el sayo, que bien les queda.











Héctor Trillo 27/07/11

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Seguidores